miércoles, 13 de mayo de 2015

MARTA HUGAS

Marta Hugas lleva algo más de tres años trabajando con la arcilla polimérica sin embargo a mí me parece que lleva en esto desde siempre. Y aunque ella misma dice que ‘intenta hacer piezas muy diferentes’ su estilo es claramente reconocible.

Os dejo con ella:

Pregunta: Hola Marta, ante todo enhorabuena por tu trabajo. Vamos a comenzar con las preguntas.
Háblanos un poco de tus orígenes. ¿Por qué elegiste ser diseñadora de joyas? ¿Y por qué la arcilla polimérica? ¿Qué formación tienes?

Respuesta: Hace mucho tiempo Miquel me regaló unos paquetitos de una arcilla de colores que servía para modelar. ¿Modelar? ¿Qué voy yo a modelar? La arcilla se pasó meses en una estantería, hasta que decidí que algo habría que hacer con eso. Me metí en internet y aluciné. Hace tres años los Reyes Magos me trajeron una laminadora y desde entonces no he podido parar.
No fue una elección premeditada, de pronto me encontré inmersa en este mundo, con tantas cosas por probar y aprender, que aún no le veo el fin. Lo que más me gusta de la arcilla es que es un material muy versátil. Con unas nociones básicas todo el mundo puede hacer una pieza decente, incluso los niños, y sus posibilidades son infinitas. Y ¿por qué joyas? Me gusta la idea de hacer algo para que otra persona se sienta más bella, por eso elegí el nombre paQUEluzcas.
En cuanto a la formación… Estudié dos cursos de Químicas, luego me pasé a Turismo. Después de años trabajando necesité hacer algo diferente y estudié Quiromasaje y después Shiatsu. Nunca llegué a ejercer, porque llegaron los hijos, que han sido mi prioridad. Siempre me ha gustado hacer cosas con las manos y siempre he estado haciendo algo (adornos, disfraces caseros, etc.). En cuanto a la arcilla el cielo se abrió cuando descubrí a Con A de Arte. Recuerdo mi primer curso, estaba como niño con zapatos nuevos. Gracias a Noe y Alex he aprendido mucho y he podido conocer a un montón de arcilleras y a otras grandes maestras como tú.

¿Cuándo empezaste?  ¿Cómo ha evolucionado tu trabajo desde entonces?¿Qué sientes cuando vuelves a ver tus ideas de hace dos o tres años



Llevo arcilleando algo más de tres años. Mis primeras guías fueron el libro “El Arte de Modelar Fimo” de Donna Kato y esos miles de tutoriales que se pueden encontrar en Youtube. El cambio más grande creo que es que antes iba probando técnicas, a ver cómo se hacía esto o aquello. Ahora ya puedo hacer lo que quiero hacer, ya tengo las herramientas técnicas. También han cambiado las referencias estéticas. Al principio todo parece estupendo, con el tiempo me he vuelto más selectiva, voy sabiendo mejor lo que me gusta y lo que quiero conseguir.
Al mirar atrás a veces me sorprendo. Hacía cosas más sencillas, pero bonitas. Esto hace que me cuestione si es necesario complicarse tanto la vida.

¿Crees que la vida del artista/artesano/diseñador es solitaria? En su caso ¿qué haces para contrarrestar esta soledad?

En mi caso, necesito soledad para crear, para tener la idea y dejarla fluir. Necesito estar en soledad, pero no me siento en ningún caso sola. Aunque sea a nivel virtual, Facebook proporciona una dosis de socialización importante en mi vida, puedes obtener un feed-back muy rápido, cuatro guiños me bastan. La familia y los amigos se ocupan de que no me convierta en una auténtica ermitaña, aislada en mi taller. Cursos y quedadas arcilleras también dan grandes dosis de sociedad.

¿Te gusta trabajar en equipo? ¿Qué ventajas/desventajas encuentras? ¿Con qué criterio seleccionas alguien con quien formar equipo creativo? Nombra tres artistas con los que te gustaría trabajar.

¡No me había planteado el trabajo arcillero en equipo! En las quedadas hacemos proyectos comunes y estamos juntas, pero no creo que podamos hablar de trabajo en equipo.
Puede ser interesante, siempre es enriquecedor trabajar con más personas, ver como lo “mismo” puede ser tan “diferente” y ser capaces de encontrar puntos de unión. Habrá que probarlo.
Mi criterio de selección diría que estaría más basado en que tenga buen rollo con la otra persona, más que en que tengamos o no estilos parecidos o maneras de trabajar parecidas. ¡¡Ana Belchí, me está usted haciendo pensar mucho!!!
¿Con quién me gustaría trabajar? Otra cosa que no me he planteado. De momento me emociono con poder asistir a cursos de artistas que no conozco personalmente y verlas trabajar, ver otras manos en acción.
¿Cuando diseñas tienes en mente algún tipo de mujer? Háblanos un poco sobre ella.
La verdad es que no. Sí que me preocupa que las piezas sean cómodas de llevar. Que no pesen, que no rocen, etc. Intento hacer piezas muy diferentes entre si, para que puedan llegar a personas con gustos diferentes, o para diferentes momentos de la vida de una persona.

Personalmente, estoy muy interesada en el proceso creativo que todo artista lleva a cabo. ¿Cómo te enfrentas al proceso creativo? ¿Tu forma de trabajar es anárquica o por el contrario pasas horas pensando, diseñando… antes de sentarte en la mesa de joyero?
Soy de tocar, así que aunque le de muchas vueltas a la cabeza y algunas veces haga mis esquemas y dibujos, hasta que no estoy con las manos en la masa, no hay nada definitivo.
Puedo diferenciar dos procesos. Uno sería el de “voy a arcillear un rato a ver qué sale”. Suele ser poco eficaz, aunque a veces hay sorpresas. El otro sería “voy a hacer algo interesante”. En este caso sí tiene que haber una idea previa, aunque no sea concreta, pero un hilo del que tirar. A veces la idea es una forma, otras un concepto, otras un color. Luego viene el trasteo con la arcilla para acabar de darle forma. Veo que en mi caso, hacer bocetos o diseños en papel no es muy efectivo. La mayoría de las veces lo que dibujé luego en volumen no me gusta.

¿Cuáles son tus fuentes para documentarte y generar ideas?
Libros, tutoriales, y sobre todo muchas imágenes, no solo de piezas de arcilla, de todo lo que me llame la atención. A veces aparece una idea en algo que nada tiene que ver con la arcilla. O a veces de algo que viste hace mucho tiempo.

¿Formas, color, concepto, por donde sueles empezar a concebir un diseño?
Primero busco un concepto, un tema. Después suelo elegir colores y finalmente la forma de la pieza. Alguna vez ha pasado delante la forma, pero casi siempre viene condicionada por el color.

¿Cómo sabes cuando has llegado al nivel máximo de una idea?

¡No sé si nunca he llegado al nivel máximo! Tengo que reconocer que no soy nada teórica, me muevo más por sensaciones (aunque seguramente llegue al mismo sitio). Al ir trabajando una pieza llega un momento que siento que todo encaja, que ya no le sobra ni le falta nada, para mi está bien. Tengo montones de piezas a las que les falta algo para considerarlas terminadas. Las voy viendo y de pronto se me ocurre el qué. Como no se ponen agrias no hay prisa.

Tu mente es tu herramienta de trabajo, ¿cómo la cuidas?
No la cuido. Eso si, cuando se atasca y necesito descansar, descanso y cuando está rebosante de ideas, pues manos a la obra, aunque sea solo anotando los proyectos, para poder vaciarla.
A mi favor diré que vivo en un sitio muy tranquilo, rodeada de naturaleza, salir al jardín ya es una gran válvula de escape y una batería donde recargar pilas.

Recientemente leí un artículo que hablaba sobre las rutinas diarias que llevaban a cabo distintos personajes de las artes. ¿Puedes contarnos cómo es un día típico en tu trabajo?

Si tenemos en cuenta que a la arcilla, aunque es ya algo más que un hobby, solo puedo dedicarle ratos libres, hablar de rutinas es complicado. Intento dedicarle al menos una hora diaria, pero no siempre es posible, a veces no tengo ni media. Sí que tengo mis fases de producción. Un día piezas nuevas, otro traseras, mientras se cuecen pinto, barnizo o lo que tenga a medias, lija y al montón, porque difícilmente acabo las piezas del tirón. El montaje requiere mucho tiempo para mi, le doy muchas vueltas. Si es que tengo un problema, no me gusta repetir y si las piezas se parecen, pues tengo que montarlas de forma diferente y esto consume mucho tiempo.

¿Te ha ocurrido que un trabajo es tan excitante que no te lo puedes quitar de la mente? ¿Cuál?
¡Si claro! Me pasa bastantes veces, como no siempre me puedo poner a arcillear cuando quiero, tengo las ideas por allí rondando y hay casos en los que hasta que no he montado el cierre tengo como una especie de impaciencia dentro, que no se calma hasta que termino la pieza.
Me ha pasado con el colgante de intercambio del Gredos Clay Festival, con el que presenté en Polimeralia, con el proyecto Grietas, retos de APE, etc.

¿En qué nuevas áreas te gustaría experimentar? ¿Qué trabajo o proyecto sería tu sueño en estos momentos?

Me gustaría aprender a trabajar los metales, pero veo mi estudio tan lleno de cachivaches que me freno, porque la arcilla sigue dándome tanta vidilla!!
Mi sueño sería poder dedicar más tiempo a la arcilla, para poder crecer más y crear mis propias técnicas. Poder experimentar sin la presión, que yo misma me pongo, que le vamos a hacer, de aprovechar el tiempo.
Profesionalmente ¿cuál es tu mayor éxito? O dicho de otro modo ¿de qué trabajo te sientes más orgullosa?

Me siento orgullosísima del colgante que presenté en Polimeralia y que fue evolucionando hasta llegar convertirse en el proyecto Grietas, que me está dando muchas alegrías.

Por último, ¿qué pregunta te hubiera gustado responder en esta entrevista?

La verdad, ¡¡¡me has hecho pensar ya mucho!!!

Podéis disfrutar del trabajo de Marta en su blog http://paqueluzcas.blogspot.com.es/ y en s flickr https://www.flickr.com/photos/paqueluzcas/

6 comentarios:

Marta Hugas dijo...

Graciasssssssss!!!! Invitada a unas cervezas!

Ana Belchí dijo...

Un verdadero placer, Marta.
Esa cervecica en Polimeralia

Besotes
Ana

Noelia Contreras dijo...

Oye yo también quiero una cerveza!!! me ha encantado! un super besazo para las dos!

Marta Hugas dijo...

Valeeee, cerveza también para Noe!!

Anónimo dijo...

Muy buena la entrevista ( lo demuestra el hecho que la entrevistada se cuestione cosas que no habia pensado ). Las respuestas me parecen coherentes en una persona que se apasiona por este mundo y evoluciona ¡ Suerte y adelante a las dos ! :)
trini

Ana Jiménez dijo...

Ains ¡y la suerte que tengo de conoceros a las dos! Sois maravillosas, la entrevista me ha encantado :-)